POLITICA
Interna gremial

Se calienta la pelea por el paro del Frente Sindical y el transporte

Los aviones y subtes van a parar el 30 de abril, se lucha "vía a vía" por los trenes y anticipan que no habrá problemas con los colectivos ese día.

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Estación de Once del Ferrocarril Sarmiento. | CEDOC

La clave de cualquier paro está en la disponibilidad del transporte. Es un punto que nadie discute en el mundo gremial y que vuelve a la escena con la convocatoria a una huelga general desde el Frente Sindical que lideran Hugo Moyano (Camioneros), Sergio Palazzo (La Bancaria) y Ricardo Pignanelli (Smata). Por estas horas, crecen los contactos con gremios estratégicos para lograr torcer la resistencia de los principales gremialistas del transporte ferroviario y automotor, enfrentados con Moyano y su Frente.

En los aviones, la pelea ya está ganada. Ocurre que este medio de transporte es sensible a la baja de cualquier sector y, en este caso, la mayoría de los aeronáuticos milita desde el inicio en el Frente Sindical. Tan es así, que antes de que adopte ese nombre, se lo llamó CGT Lazica, en referencia a la calle donde está la sede del gremio de pilotos APLA, que fue lugar de encuentro de los disidentes que rompieron finalmente con la CGT con una multitudinaria misa en Luján el año pasado.

El jueves 11 de abril estaban en el estrado el titular de APLA, Pablo Biró, y Juan Pablo Brey, secretario de Aeronavegantes. Un video con la arenga de Biró ese día se viralizó por una frase en la que habla de voltear al Gobierno, por si alguno tenía duda sobre su compromiso y el del resto de los aeronáuticos en relación a la medida de fuerza contra el Gobierno.

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También está garantizada la adhesión en la red de subterráneo, donde los metrodelegados que se dividen entre al CTA y la izquierda combativa ya confirmaron su participación. Hay un sector, que tiene la representación oficial, que responde a la UTA, pero en el pasado se ha visto que la voluntad de los metrodelegados es suficiente para garantizar que no funcione la red urbana. Menos claro es el panorama en el caso de los colectivos, donde el moyanismo busca fomentar las disidencias en la UTA pero parece difícil que pueda quebrar la voluntad de su secretario, Roberto Fernández.

En el caso de los ferrocarriles, se anticipa en cambio una pelea “vía a vía”. Omar Maturano (La Fraternidad) apuesta como Fernández a un paro de actividad, que no se deciden a llamar huelga, el 1 de Mayo. Estos dos gremialistas, que actúan en tándem, fueron los impulsores de anunciar antes de la reunión del Frente Sindical que los trabajadores de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte  “no concurrirán a trabajar en homenaje a los mártires de Chicago” como un modo de horadar la iniciativa moyanista.

Tampoco hay apoyo al paro del 30A en la Unión Ferroviaria que conduce Sergio Sasia. La única excepción es la seccional oeste, que conduce Rubén “Pollo” Sobrero, dirigente del Frente de Izquierda, que ya anunció su adhesión al paro por lo que seguro habrá problemas para viajar ese día en la Línea Sarmiento. En el resto de las líneas, la clave está entonces en dos gremios pequeños que podrían torcer la voluntad de Sasia y Maturano: los señaleros de AFSA y los jerárquicos de APDFA.

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Los señaleros están cerca del Frente Sindical y todos recuerdan que en noviembre del 2012 lograron parar los trenes a pesar de que no adherían a ese paro de la CGT Azopardo ni la Fraternidad ni la Unión Ferroviaria. Pablo Moyano visitó el gremio el 3 de abril pasado, un día antes de la marcha sindical que copó la ciudad. Sin embargo, algunas voces del sector señalan que no hay garantías de que adhieran. En el caso de los jerárquicos, resistieron un paro lanzado en el Sarmiento el 19 de marzo pasado por la muerte de un trabajador ferroviario.

AT EA