OPINIóN
Política

Sobre la gestión de las expectativas

El principal desafío de Alberto Fernández no está en lo que esperan los argentinos de él sino en lo que espera internamente su coalición de gobierno.

Alberto Fernández
Alberto Fernández | CEDOC

El concepto de "exceder expectativas" de los clientes es muy conocido en el ámbito empresarial, hay cientos de libros y papers publicados sobre la importancia de entender qué está esperando el cliente de un determinado producto o servicio, y darle un poco más para que quede satisfecho, lo vuelva a comprar y lo recomiende. La clave para fidelizar un cliente es darle un poco más de lo que espera.

La misma premisa se aplica a la política, solamente que no es un tema tan desarrollado teóricamente en los ámbitos académicos ni profesionales. Para conseguir el apoyo de un ciudadano hay que entender qué es lo que espera y darle un poco más, hacerle la vida un poco más fácil en ese asunto que tanto le preocupa. Es por eso que en las encuestas siempre está incluida la pregunta "¿cuál es el principal problema de usted y de su familia?" porque el elector vota por quien le ofrezca una solución creíble al problema que no lo deja dormir en las noches.

El primer mes de Alberto Fernández tranquilizó a los mercados, según una consultora

Los gobiernos hacen muchas cosas pero son recordados por muy pocas, algunos logros quedan marcados en la memoria de una sociedad y otros, la mayoría, se pierden en el olvido. Al final, la gente solo recordará lo que exceda sus expectativas en los temas que realmente le importan.

Entendiendo ésto comprendemos la necesidad de hacer una gestión de las expectativas de los ciudadanos al comenzar un nuevo gobierno, porque si éstas son muy elevadas será muy difícil superarlas, pero si se mantienen en medias o bajas, es más fácil lograr una alta aprobación del trabajo del Presidente.

Por qué el Gobierno eligió lanzar una tarjeta alimentaria en vez de reforzar la AUH

Tomemos por un momento el caso del gobierno de Mauricio Macri, su principal problema estratégico fue la instalación de expectativas tan ambiciosas que después se volvieron imposibles de ser alcanzadas ¿es posible llegar a tener una "lluvia de inversiones"? ¿cuánto debía bajar la pobreza para alcanzar la "pobreza cero"? ¿cuán bueno tenía que ser ese ¨segundo semestre¨ para que valga la pena la espera? Quizás el mayor logro de su gestión, el equilibrio de la balanza energética, quedó opacado porque no fue planteado estratégicamente dentro de una necesidad real que tenían los Argentinos.

El Gobierno planea tener un nuevo índice de movilidad jubilatoria en marzo

En el caso del gobierno de Alberto Fernández sí tuvo mucho cuidado en mantener alcanzables las expectativas de su gestión, sólo se espera de él que ponga algo de dinero en el bolsillo de los argentinos y que mantenga la economía sin grandes sobresaltos ni defaults, no mucho más. Tener expectativas razonables para su gobierno es un importante activo de su gestión que parece estar sabiendo manejar. Su principal desafío, entonces, no está en lo que esperan los argentinos de él, sino en lo que espera internamente su coalición de gobierno ¿se puede hacer un gobierno que satisfaga a Sergio Massa sin dejar de representar a Cristina Fernández? ¿podrá exceder las expectativas de los gobernadores peronistas sin perder el apoyo de Juan Grabois y los movimientos sociales? Ahí residirá el principal desafío del Presidente.

Cómo funcionan las Lebad, la creación del Gobierno para canjear letras reperfiladas

La diversidad de intereses dentro un gobierno ha sido causa de graves problemas en nuestro pasado y en otras democracias del mundo. Es en este equilibrio de expectativas internas donde se juega el éxito o el fracaso del gobierno de Alberto Fernandez, que no es poca cosa.