"Aquarius" en fotos: así llegaron a España los 629 africanos que Italia no quiso recibir
Personas de 31 países, entre ellos 68 niños, navegaron a la deriva durante semanas antes de que Valencia les abriera sus puertas.
Tras varios días de disputas y cuando la comida y el agua potable comenzaban a escasear en el barco, España se ofreció a recibir a los inmigrantes con un plan llamado “Operación Esperanza Mediterránea”. |
SOS Mediterranée / AFP
El barco Aquarius, que desató una tormenta diplomática en la Unión Europea, llegó el domingo al puerto de Valencia, en España, junto a las organizaciones Médicos sin Fronteras y SOS Mediterranée, con los 629 migrantes rescatados en el mar.
El desembarco se concretó en tres etapas, en medio de la emoción y el llanto de los migrantes. Primero lo hizo el barco Dattilo", de la Guardia Costera italiana, dejó a 274 personas. Luego el Aquarius llegó con otras 106 personas, y por último, el Nave Orione, también de la marina italiana, con 249 migrantes. La Cruz Roja organizó dos campamentos para atender a los migrantes africanos y realzar las primeras asistencias médicas.
El Aquarius quedó varado ante la costa de Sicilia el 9 de junio cuando el nuevo gobierno italiano le negó la entrada a puerto, remitiéndolo a Malta. Pero esa nación tampoco admitió el ingreso del buque.
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Tras varios días de disputas y cuando la comida y el agua potable comenzaban a escasear en el barco, España se ofreció a recibir a los inmigrantes con un plan llamado “Operación Esperanza Mediterránea”. El recorrido de 1.500 kilómetros desde Sicilia hasta Valencia duró casi una semana.
"Hasta que los gobiernos europeos no asuman sus propias responsabilidades, el Aquarius estará obligado a continuar conduciendo operaciones de búsqueda y rescate en el mar Mediterráneo", escribió en Twitter Médicos Sin Fronteras.
David Noguera, director de Médicos Sin Fronteras en España, dijo estar contento de que Madrid permitiera la entrada de los migrantes, que fueron rescatados en aguas de Libia. Sin embargo, se mostró preocupado de que más naciones europeas cierren sus puertos a los migrantes rescatados en el mar.
“Tengo una mezcla de sensaciones”, dijo Noguera tras la llegada del primer barco. “(Estoy) contento de que el viaje acabe, un viaje que ha sido demasiado largo, y preocupado por la situación en el Mediterráneo y el bloqueo de los puertos europeos”.
El gobierno regional valenciano preparó un plan especial de emergencias formado por 2.230 personas, en el que participan médicos, traductores, psicólogos, cuerpos de seguridad y voluntarios de la organización humanitaria Cruz Roja, entre otros.
Tras una primera inspección médica, fueron llevados a centros de recepción y las mujeres a bordo de la flota recibirán atención especial para detectar si fueron víctimas de trata.
Cruz Roja, por su parte, preparó 1.000 kits de primera necesidad -calzado, ropa, productos de higiene y barras energéticas para bebés- y 15 toneladas de productos alimenticios. En el puerto de Valencia se dispusieron un centenar de camas y otras cien de reserva, así como un albergue provisional con capacidad para 350 personas.
Hasta el momento se habían detectado 31 nacionalidades distintas entre ellos. La mayoría provienen de Sudán, Argelia, Eritrea y Nigeria, según las autoridades españolas. Hay también 6 mujeres embarazadas y 68 menores de edad, 48 de ellos sin un adulto acompañante.
RECHAZADOS POR ITALIA Y MALTA
Hace una semana el barco asistido por las ONG rescató a las 629 personas en el mar que estaban en botes repletos y corrían el riesgo de naufragio. La embarcación pidió autorización para atracar en puertos de Italia y Malta pero recibió una negativa de sus gobiernos.
Malta recibió hasta el momento sólo a unos pocos migrantes que cruzan el Mediterráneo para llegar a Europa, mientras que Italia carga con la mayor parte del problema. El nuevo gobierno italiano quiere que esta situación cambie.
La Liga y el Movimiento 5 Estrellas comenzó de inmediato a aplicar políticas migratorias estrictas, por lo que su respuesta desató una tormenta de críticas internacionales. El vicepremier y ministro del Interior, Matteo Salvini (Liga), llegó a decir que "Sicilia no será un campo de refugiados", medida que se extiende a toda la península.
La decisión de Italia de cerrar sus puertos a los inmigrantes rescatados por organizaciones humanitarias en alta mar muestra que Italia de ser "el felpudo de Europa", señaló Salvini en Facebook: "Es una muestra de que algo está cambiando, hemos dejado de de ser el felpudo de Europa".
En un acto político en Seregno, el líder del partido ultraderechista Liga dijo que su país dejó de ser "una nación ocupada, una nación esclava" de Europa e instó a España y otras naciones a recibir a más inmigrantes.
Según informó el diario "El País" los 629 migrantes recibirán del gobierno español una autorización de residencia de 45 días, permiso que prevé la ley de extranjería por circunstancias excepcionales, en este caso humanitarias.
Tras ese plazo, la ley se aplicará atendiendo a la situación de cada uno de los refugiados. En cambio, a los 1.290 inmigrantes llegados en "pateras" a Andalucía en las últimas horas se les abrirá expediente para su devolución por haber intentado entrar irregularmente.
“La ley considera que los que entran en patera están entrando ilegalmente en España. En el caso del Aquarius son náufragos recogidos en el mar y su entrada está autorizada”, explicó Francisco Solans, abogado especialista en inmigración, a El País.
