ELOBSERVADOR
EN LA MATANZA

Nadie usa el hospital que "inauguraron" cinco veces

Tiene 20 mil m2 y 150 camas. Se anunciaba como materno-infantil, pero no tiene guardia pediátrica y está permanentemente semivacío.

Colores. Desde su primera inauguración, el hospital cambió hasta de fachada: era roja y hoy es naranja.
| Cedoc

Conocido como “el hospital de las cinco inauguraciones”, el Dr. Alberto Edgardo Balestrini, de La Matanza, cumplió el 4 de octubre un año de su último corte de cintas. Para conocer el estado de sus servicios, que además iban a servir como modelo de los llamados “Hospitales del Bicentenario”, PERFIL hizo una recorrida por sus instalaciones en la intersección del Camino de Cintura y Ruta 21 en Ciudad Evita.

En la visita, este medio descubrió que se parece más a una gran sala de emergencias que a un hospital zonal general de agudos, tal como es presentado. El ostentoso edificio pintado de color naranja y crema, dependiente de la provincia de Buenos Aires, estaba semivacío, con menos de diez pacientes esperando en el hall central para ser atendidos. El lugar no cuenta con guardia pediátrica y la de adultos atiende según la gravedad del paciente. Además, sufre de falta de instrumental y personal profesional.
Según anuncios oficiales, entre marzo y abril de este año tendría que haber estado funcionando por completo. Sin embargo, PERFIL chequeó que aún hay alas sin estrenar en sus 20 mil m2.

Gigante vacío. Tanto fuentes del hospital como del gobierno municipal indican que la falta de servicios y prestaciones se debe a la ausencia de profesionales y equipamiento. Guillermo Cubelli, ex director asociado del hospital, dice a PERFIL: “Nosotros habíamos formado varios equipos de profesionales con sentido de pertenencia y formación humanística a lo largo de los últimos años, pero por problemas de falta de fondos para los salarios o que se atrasaba la inauguración se fueron desintegrando. Ahora es difícil conseguir personal”.

Gabriela Alvarez, secretaria de Salud Pública municipal, concuerda: “El problema es encontrar recurso humano. Hay muchos profesionales que son de Capital y no quieren ir hasta La Matanza”.

En el lugar que lleva el nombre del expresidente del PJ y exvicegobernador bonaerense, internado tras sufrir un ACV el 7 de abril de 2010, se atiende por orden de llegada, de lunes a viernes, o se brindan turnos con un mes de demora para especialidades como médico clínico, ginecología, obstetricia, nutrición, dermatología, oncología, diabetología, kinesiología y traumatología. PERFIL se comunicó con el director del hospital, Dr. Benito Alem González, que se negó a dar una entrevista. Según la web del Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires, ya se atendieron 85.774 pacientes desde su última inauguración.

Sin guardia. A pesar de ser denominado como hospital materno-infantil, hay pediatría de lunes a viernes por la mañana, pero no hay guardia pediátrica. Una fuente cercana al directorio del hospital explicó que esa era una de las condiciones para obtener el crédito de 130 mil millones de pesos del BID y que por eso se lo definió con esa especialidad, pero que más adelante “le cambiaron el nombre a hospital zonal general de agudos”.

En la entrada hay carteles que indican que a pesar de tener consultorios externos, no se extienden certificados, ni se llenan libretas, ni se emiten certificados por discapacidad. Tampoco, indica otro cartel, se atienden consultas por Alzheimer, Parkinson o epilepsia. Está habilitada el ala de internación media, que al momento de la visita tenía ocho pacientes internados, del total de las 144 camas que informan tener; el área de terapia intensiva contaba con 14 camas ocupadas y neonatología con 15 bebes internados.

Al recorrer el edificio, PERFIL le preguntó a uno de los empleados del lugar por qué el hospital estaba semivacío y respondió que “no es muy conocido en la zona”. Una explicación que Cubelli desmiente, ya que informa que en el hospital se llevó adelante un modelo de trabajo que “serviría de ejemplo para el resto de los hospitales: emplear como cuidadores del hospital a gente del barrio. La idea era que cuando alguien llegara, viera una cara conocida y queríamos dar charlas por los alrededores. Pero el problema fue que se quiso abrir en octubre del 2013, antes de las elecciones legislativas, cuando el hospital lo único que podía poner en funcionamiento era la emergencia, con unas camas de observación y algunos consultorios externos. Y hoy no es mucho más que eso”.

El último anuncio realizado con respecto al hospital  en septiembre de este año asegura que en el Balestrini ya realizan ecocardiogramas y radiografías odontológicas. Sin embargo, un médico del hospital denunció que “es una cáscara. El hospital no tiene tomógrafo, ni resonador, tampoco hay instrumentos para traumatología, urología y le falta instrumental para cirugía. “Es un gran elefante naranja: un hospital enorme que no tiene equipamiento”.

 

Los hospitales del Bicentenario aún son obras

Anunciado el 17 de octubre de 2008, el Plan de Construcción de Hospitales del Bicentenario prometía que en 24 meses como máximo estarían funcionando los centros de salud que aún están en construcción en distintos puntos del conurbano bonaerense. Son dos en La Matanza (Rafael Castillo y Laferrère), uno en Esteban Echeverría, uno en Ituzaingó y otro en Escobar. El sexto hospital, que debía estar en General Rodríguez, jamás se hizo: en su lugar está la cancha de fútbol del polideportivo municipal. A casi seis años de ese anuncio, así están hoy:

-Ituzaingó: se decía que debía inaugurarse a mediados de año, pero aún está en obra. La construcción se inició en julio de 2011 con un presupuesto de $ 200 millones. De acuerdo a un ex concejal del partido que prefiere preservar su identidad, “el plan original era construir un hospital entre Nación y Provincia, pero esto cambió y pasó a ser un hospital del PAMI, por lo que se va a priorizar la atención a personas de la tercera edad”. En septiembre de 2013, hubo un accidente y murió un trabajador. Según el ex edil, Iecsa, propiedad de los hermanos Angelo y Fabio Calcaterra, primos de Mauricio Macri, es la empresa constructora encargada de la obra que “quieren inaugurar junto con las elecciones de 2015”.  

-Escobar: son 17 mil m2 en la localidad de Garín, se invirtieron unos $ 300 millones. La construcción se inició en diciembre de 2011. En diálogo con PERFIL, el periodista Pablo Aiello, director de Escobar News, reveló que “desde hace algunos meses la obra está paralizada por falta de pago al personal”. También es el PAMI el organismo encargado de la licitación y la puesta en obra del mismo. Aiello dice que “lo que sucede es una cuestión política: el intendente Walter Blanco cambió de bandera y se pasó del FPV al Frente Renovador. El gobierno nacional cortó el envío de fondos”.

-La Matanza: los dos centros de salud materno-infantiles del partido del hospital Balestrini estarán en Laferrère y Rafael Castillo, aunque son obras más avanzadas que el resto, porque comenzaron en 2010. Gabriela Alvarez, secretaria de Salud Pública municipal, le explicó a PERFIL que las obras están avanzadas en un 80%, y serían inaugurados en marzo de 2015 y no este año como se había anunciado. El retraso se debe a que “las licitaciones llevan mucho tiempo”, se excusó.

-Esteban Echeverría: en obra desde agosto de 2011, se edifica en el antiguo frigorífico Monte Grande. Se invirtieron $ 200 millones y tendría 20 mil m2, con fondos de PAMI y provinciales. El progreso de este edificio, que ya cuenta con los cuerpos de internación B y C terminados, sumando un total de 140 camas sólo en este sector, tiene como objetivo principal descomprimir al Policlínico Santamarina, que prevén que se transforme en un materno-infantil una vez que se inaugure el flamante hospital. La obra se realiza bajo la supervisión de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Buenos Aires y de la Secretaría de Obras Públicas. Su inauguración se estima hacia finales del 2015.

-General Rodríguez: al lado del Hospital Interzonal General de Agudos Vicente López y Planes, se iba a realizar un nuevo centro de salud, pero la obra jamás se hizo. En octubre de 2010 se firmó una ordenanza de excepción en la que el Concejo Deliberante del partido autorizaba al intendente, Juan Pablo Anghileri, a donar parte de los terrenos en los que se encuentra el polideportivo municipal para construir el Hospital del Bicentenario, hecho que nunca ocurrió. PERFIL habló con el periodista Rodolfo Barelli, director del diario Acción de General Rodríguez, quien confirmó que todavía “no se ha puesto ni siquiera la piedra fundamental” que dé inicio a la obra. “Sólo se limpió el terreno, y cortaron los árboles del parque, que era centenario, y que había sido diagramado por el paisajista Carlos Thays”. No se licita “porque nadie sabe si efectivamente va a cobrar”.