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CóRDOBA
Cumbre sectorial

En plena crisis, Macri vino a cazar buenas noticias entre automotrices

Tras el cimbronazo cambiario, el Presidente se refugió en territorio amigo y en un sector en el que se siente cómodo. Promesas de inversión y síndrome del diario de Irigoyen.

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FAMMA. La firma local propiedad de la familia Martínez provee material a Nissan y a Fiat. Fue una de las que recibió la visita de un Macri que está vez se mostró más parco que en otras oportunidades. | Cedoc

La secuencia de corrida cam­biaria, devalua­ción, suba de tasas, reajuste fiscal, búsque­da de apoyo en el FMI, sincera­miento de metas y nuevo reajuste fiscal golpeó de lleno en el capital político del Presidente Macri. Con una economía mucho más tibia de lo proyectado, las buenas noticias que prometían florecer hoy se cuentan con los dedos de la mano.

El consumo era un terreno perdido. La construcción ve­nía in crescendo pero la in­certidumbre financiera y el encarecimiento que se espera en los créditos no será gratui­to. El campo asomaba con un año récord, hasta que el clima metió la cola.

Así, la producción y comer­cialización de autos es una de las pocas actividades que todavía puede animarse a sostener números positivos. Y Córdoba sigue siendo, para el Presidente, territorio amigo. Incluso después de los últimos sondeos que muestran que la valoración de su gestión entró por primera vez en terreno negativo (aprueban 49,1%, re­prueban 50%, según datos del consultor Gustavo Córdoba). Por eso, a pocos sorpren­dió la decisión de Macri de sumarse a la reunión de la Mesa Sector ial Automotriz que “sesionó” en la ciudad.

Guiño italiano. Lo cierto es que con poco concre­to por anunciar, Macri volvió a Córdoba, bajó algunas líneas en relación a la responsabili­dad empresarial para que avancen los nuevos conve­nios laborales, cumplió con el libreto autoimpuesto de pedir que se trabaje por dismi­nuir el déficit fiscal, visitó fir­mas autopartistas y metalúrgi­cas y participó en el análisis de las metas del “Plan 1 millón”. Fue una visita con intención de “captar” alguna buena noticia en un sector con el que se sien­te cómodo por su trayectoria empresarial.

Así, el guiño vino de par te de un viejo co­nocido: Cristia­no Rattazzi. El CEO de FCA se “resfrió” y contó un proyecto que en el Gobierno provincial ya conocían, pero aún no habían capitalizado la forma de anunciarlo. En plena visita presidencial, Ratazzi se­ñaló que la a u t o m o ­triz evalúa invertir US$ 100 millones para comenzar a producir cajas de cambio en Córdoba. “Esto nos había contado (Sergio) Marchione, el CEO de Fiat Chrysler Auto­mobiles, cuando vino la últi­ma vez, pero nos dijo que no se comente nada, que no esta­ba firme. Hoy es un proyecto concreto y lo contó Rattazzi”, apuntó una fuente del gobier­no provincial.

Mesaza, pero con poco avan­ce. El plano donde podría ha­berse avanzado fuertemente fue el de la Mesa Sectorial, pe­ro por lo que se comentó el encuen­tro sirvió para actua­lizar el estado actual del “Plan 1 millón”, que busca lle­gar a esa cantidad de vehí­culos made in Argentina para el 2023. Participaron automo­trices, proveedores, gremios y gobiernos. “Fue una reinaugu­ración de las tareas de la mesa sectorial automotriz que ya se llevó adelante el año pasado. Pero no se habló de cuestiones como el dólar. Hoy, hace más competitiva a la industria, pero hay que ver que no se vaya a precios. Sí nos preocupa que el sector autopartista compre las piezas en dólares y luego las venda en pesos. Eso hay que hablarlo con las automotrices porque sino las autopartistas se desfinancian”, marcó Isabel Martínez, al frente de las me­talúrgicas Fumiscor y Famma.

Desde Adefa, la asociación de fabricantes de autos, Luis Fernando Peláez Gamboa señaló “nuestro objetivo es mejorar la competitividad del sector para contar con una industria automotriz sustentable internamente y bien plantada frente a la com­petencia externa” y añadió que en 60 días se volverán a reunir para presentar los nuevos avances de los puntos pendientes que se conversa­ron y consensuaron durante la reunión.

Irigoyeneada. La visita de Macri en medio del vendaval cambiario dejo, obviamente, mucha tela para las especula­ciones y las lecturas. Un fun­cionario provincial dio la suya en diálogo con PERFIL COR­DOBA: “Están claras dos co­sas: que vino a un lugar donde puede dar buenas noticias en un momento muy complicado. Y lo otro es que hay varios mi­nistros que le arman el diario de buenas noticias al Presiden­te y no dejan que le lleguen las cosas no tan positivas. Noso­tros hablamos con los empre­sarios, recibimos muchas in­quietudes, pero esas cosas no se hablaron en la mesa. Fueron todos discursos muy correctos y muy por arriba. Nadie se sa­lió del libreto”, precisó.

Crear un polo de cajas, la apuesta del gobierno 
Si se materializa la inver­sión de FCA para la produc­ción de cajas de cambio, la ciudad puede posicionarse como un polo interesante en la fabricación de un pro­ducto especializado. En el gobierno reconocen que la idea inicial de la compañía de producir un motor es de muy difícil concreción, pero producir cajas de cambio es algo firme.  
“Decidir una inversión para produci r motores implica destinar US$ 400 millones para un proyec­to a 10 ó 15 años. Y hoy la industria no sabe cómo se­rán los motores para esos años. Hay mucho cambio tecnológico. Con la caja de cambio no pasa lo mismo: en Córdoba VW anunció la fabricación de otra ca­ja, ya está desarrollado el grupo de proveedores y se está gestando una especie de clúster de pymes para abastecerlos. Eso sí es muy viable”, acotó un funciona­rio provincial.