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PANORAMA / de capos a incomprendidos

Carta al equipo económico

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DUJOVNE. Semanas duras del ministro. | Cedoc perfil

Estimados miembros del equipo económico del gobierno de Cambiemos:
Les escribo porque no puedo creer el palo que se están pegando. Realmente, si me preguntaban en 2015, esperaba que hubiera bardo por fábricas cerradas en La Matanza producto de un aumento de importaciones, o porque los comercios de San Martín pagarían de luz lo mismo que de alquiler, o porque se irían de mambo con el recorte de planes sociales o con un achicamiento de la cobertura del PAMI. Pero la verdad, jamás me imaginé que la mayor crisis del gobierno de Mauricio Macri iba a venir desde el palo de las finanzas, por falta de dólares y la furia de los fondos y bancos de inversión que acunaron el proyecto de Cambiemos haciendo un foro apologético por mes o regando de CEOs las convocatorias oficiales.
¿Qué les pasó, Toto? ¿Se cebaron con la desregulación del mercado de capitales, Federico? ¿Se entregaron al lobby de los amigos que quedaron del otro lado del mostrador, Nicolás? ¿Se confiaron de sus amigos con oficina en Nueva York, Alfonso,? Sí, Alfonso, porque vos sos parte del lío, cuando largaste el cepo diciendo que “todo estaba a $ 15”. ¿No la vieron? Si todavía me acuerdo de algunos de ustedes diciendo en un café en la Casa Rosada: “Nosotros vamos a tener siempre el problema de la apreciación cambiaria, por el fuerte ingreso de dólares que vamos a tener todo el mandato”. Parece un chiste ahora.
 ¿En serio estamos otra vez atragantados por falta de dólares? No te digo que cumplieran con la lluvia de dólares para inversión productiva, que proliferen fábricas, empleo industrial, exportaciones, nuevos mercados. Pero no puedo creer cómo nos secamos de guita financiera, de la que a ustedes los hizo grandes, supuestamente los mejores, los más capos, esos que vienen a buscar desde JP Morgan porque aúnan conocimiento técnico con la cintura para sobrevivir al samba de la macro argenta. Y una vez que se sientan de este lado, ¿cómo fue que se les armó este quilombo?
No se puede creer. Nos hablan de entrar a la OCDE, de integrarnos a los mercados, de que el mundo nos re-confía y por eso vamos a presidir la burocrafiesta del G20 este año, pero no podemos parar de devaluar y terminamos yendo a pedir la escupidera al Fondo Monetario Internacional. Son los más grosos de las finanzas, las saben todas, de hecho muchos de ustedes ni la traen por estas mismas crisis, pero son casi un espejo de mi familia, donde nunca fuimos chief of emerging markets de nada y un día hacemos planes para ir a un all inclusive, pero los cancelamos porque terminamos pagando el gas en cuotas, como nos ofrece Juanjo.
Yo sé, se les nota, que están cansados. Hartos. Resignados. Algunos de ustedes hasta ya avisaron que si, por una de esas casualidades enderezan el barco y tienen chances de reelegir, no van a ser parte de un segundo mandato porque manejar este país es mucho más complicado que una filial de una multinacional o las carteras de inversión de fondos en Wall Street. También me enteré de que incluso algunos de ustedes están hasta enojados. Repiten la frase del momento: “Con la Argentina no se puede” o su variante “Acá hay un problema cultural muy grande”. Lo resumen así, en peronismo, en estatismo, en clientelismo, o sus variaciones similares que explican el apego a que el Estado te solucione problemas que ustedes se solucionaron solos a base de estudio y carreras exitosas. Les hincha las pelotas, también lo sé, que acá les hagan historia por una cuenta offshore, por una inversión en el exterior, cuando en el fondo esa misma desconfianza primaria de su decisión es la que hoy replican hasta los ahorristas minoristas más chicos que van a pedir los US$ 5 mil que tienen juntados en un banco y que para ustedes son una cena.
Sé que muchos de ustedes vinieron a este barco con buena leche. Se los agradezco. No tenían por qué, ganaban más en bancos y empresas e incluso algunos en Cambiemos les toman el pelo porque dicen que “vinieron como a donar sangre”. Pero si es una aventura temporaria para tratar de aportar algo, bajen el copete un toque. Ya el palo se lo pegaron. El Gobierno después de estas semanas, no va a ser igual. La inflación baja no va a ser cumplible. El crecimiento sostenido está en duda. Pónganse objetivos módicos. Pasitos cortos. Déjense ayudar.